viernes, 28 de octubre de 2016

Hay cosas que tienen buena prensa. Dos ejemplos: la aventura, la novedad. Yo creo más en aventuras para la que no siempre están dotados los tipos dispuestos a cruzar a nado el Estrecho de Gibraltar, lanzarse de un puente atados a una cuerda, pernoctar en la selva. Las cosas que pueden hacernos felices son pocas y sencillas. Se pueden hacer a diario, están ahí como la noche para quien se atreva a pasarla en vela cuando valga la pena.