Cuando la vida se pone del color de la ceniza, cierro los ojos y estoy de nuevo en las escaleras de la huerta, entre los helechos crecidos, bajo el vientre luminoso e hinchado de la parra, con las manos pringadas de aquel granate mágico de las ciruelas esparcidas por el suelo que parecían haber caído del cielo más que de los árboles. En ese momento, despacio, casi siempre llueve, y yo me rindo feliz, ya sin temores, al aroma inconfundible que parece también llover desde las ramas del inmenso naranjo que invadía el camino.
jueves, 30 de junio de 2022
martes, 28 de junio de 2022
domingo, 26 de junio de 2022
sábado, 25 de junio de 2022
viernes, 24 de junio de 2022
martes, 21 de junio de 2022
lunes, 20 de junio de 2022
domingo, 19 de junio de 2022
viernes, 17 de junio de 2022
jueves, 16 de junio de 2022
lunes, 13 de junio de 2022
sábado, 11 de junio de 2022
viernes, 10 de junio de 2022
jueves, 9 de junio de 2022
Sólo de tarde en tarde consigo ver todo lo que tengo delante de los ojos. En movimiento, vivo. Cuando sucede, vuelvo sin remedio —quiero decir feliz— a aquellos relámpagos que iluminaban en un instante la ría. Esa extraña plenitud, ese milagro para todos, es lo que busca el poeta. Es lo que encuentra cuando acierta.
miércoles, 8 de junio de 2022
domingo, 5 de junio de 2022
sábado, 4 de junio de 2022
viernes, 3 de junio de 2022
jueves, 2 de junio de 2022
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