sábado, 31 de agosto de 2019

Murmullos. En todo lo que retumba en el fondo de las almas late muy lentamente el rumor de lo que vive. La primera gota que cae en el jardín sin nadie, una taza de café en la madrugada, los pasos de un anciano en la casa vacía y el roce de sus dedos en los muebles antiguos, un fruto que madura antes de tiempo y se corrompe en la hierba, la mirada de un perro en la puerta del patio, el olor del geranio que inaugura los días, esa ola que llega haciéndose caricia más allá de la niebla, este rayo de sol en el suelo del cuarto, la nata en el alféizar, el dibujo de un niño que nunca se termina, el camino del bosque, el libro que escribimos entre todos meramente viviendo, la mujer compasiva que llora en la cocina mientras el agua hierve y se consume, la pereza del gato que la mira, el silencio que se adueña de las horas, la luz que se mantiene después de la derrota, el sueño leve, la música callada que escuchamos de noche. Esta mano tendida.

viernes, 30 de agosto de 2019

Cuando te mire la muerte, riega el surco en el que estabas, añade una semilla. Como si tú no la vieras.

jueves, 29 de agosto de 2019

Hay palabras que llegan a casa con su desamparo a cuestas, casi exhaustas, lo que invita a que les dejemos la puerta abierta. Por si fueran la primera piedra.

miércoles, 28 de agosto de 2019

No siempre hay que buscar la verdad y la belleza en las profundidades. A veces salta a la vista, nada contra la corriente.

martes, 27 de agosto de 2019

Entre el vacío y la grandilocuencia, la sencillez de lo que ocurre cada día, el aire que respiramos, las luces que se apagan cada noche en la aldea perdida, el río que pasa por delante de la puerta sin desvelarnos todo lo que sabe.

lunes, 26 de agosto de 2019

El lugar genuino del poeta: cualquier parte, a solas con la palpitación de las palabras.

domingo, 25 de agosto de 2019

Los que se acostumbran a ocupar el púlpito ya nunca se reconocen allá abajo, en los bancos ocupados por los feligreses. No saben qué hacer cuando se bajan.

sábado, 24 de agosto de 2019

viernes, 23 de agosto de 2019

Busca el tesoro entre las cosas humildes que le dan a tu casa el calor de la vida. Que no te deslumbre el resplandor de lo superfluo.

jueves, 22 de agosto de 2019

miércoles, 21 de agosto de 2019

martes, 20 de agosto de 2019

lunes, 19 de agosto de 2019

Cuidado. La estupidez es patrimonio de todos. Con humildad, los mejores consiguen evitarla. Casi siempre.

domingo, 18 de agosto de 2019

Los niños sólo necesitan un gesto para cambiar el mundo. Lo hacen a diario sin esfuerzo.

sábado, 17 de agosto de 2019

No deja de asombrar el desconcierto con que el poderoso, de tanto en tanto, recibe la condena pública por sus latrocinios. Un solo “pensamiento” ocupa su cabeza: cómo me puede estar pasando esto a mí.

viernes, 16 de agosto de 2019

Con la edad, como nosotros, también el miedo se vuelve insomne. Quizá porque intuye que las cosas han empezado a ocurrir.

jueves, 15 de agosto de 2019

Cada mañana libramos una batalla inconsciente por extraer de las cosas más sencillas el sentido de la vida, el calor que reclama el corazón. Como debe ser.

miércoles, 14 de agosto de 2019

Contempla con emoción el vuelo de los pájaros. Una y mil veces. Aprende.

martes, 13 de agosto de 2019


Perderse de vez en cuando es hallar el camino de la intimidad que nos devuelve, indemnes, a la transparencia de nuestra propia vida.

lunes, 12 de agosto de 2019

Convivir con la mayoría es un esfuerzo de consecuencias a menudo nocivas. La verdadera tarea, sin embargo, es hacerlo con uno mismo.

domingo, 11 de agosto de 2019

Los poderosos se pasan la vida haciendo cuentas. Los pobres pueden permitirse el lujo de prescindir también de esa servidumbre.

sábado, 10 de agosto de 2019

Perdida la fe, nos queda el recurso de la imaginación, que debería estar al alcance de cualquiera.

viernes, 9 de agosto de 2019

jueves, 8 de agosto de 2019

Distinguir el momento en que sólo necesitamos prescindir de lo que nos impide caminar.

miércoles, 7 de agosto de 2019

Tirar del hilo, ese es el juego. Deshacer pasito a paso la madeja. Hacerlo con tiento para que no se rompa.

martes, 6 de agosto de 2019

La fuente. Supongo que todo el mundo tiene sus pequeñas mitologías personales, siempre relacionadas, como es lógico, con la antigüedad de la infancia. Con más razón si ha transcurrido en algún lugar en sí mismo rodeado del misterio que la niebla infunde a todo lo que toca. Allí, entre la huerta y el mar, los “dioses”eran legión y tengo para mí que nos tenían algo de envidia, por eso se disfrazaban de humanos con tal de entrometerse como fuera en nuestros juegos. El lugar de culto que ha perdurado en mi conciencia por encima de los demás es la fuente. Supongo que no es gran cosa, pero estaba allí cuando vinimos al mundo, como el horizonte, como el camino del faro. Aunque nuevas construcciones la hayan ido arrinconando, su belleza humilde, el frescor del agua, los cuatro caños a los que nos encaramábamos para beber a morro y las docenas de veces que bajamos la cuesta (¡hay que ir a por agua!) para llenar la senlla, aquella fuente sagrada permanece incólume en el lugar más transparente de mi memoria. Y ahora, porque algunos milagros existen, también en el salvapantallas de mi portátil.

lunes, 5 de agosto de 2019

Cuesta creerlo: el paisaje se estremece ante la fidelidad de la mirada de aquel niño.

domingo, 4 de agosto de 2019

Puede que tengas razón, aunque no parece muy razonable que necesites imponérmela.

sábado, 3 de agosto de 2019

viernes, 2 de agosto de 2019

jueves, 1 de agosto de 2019

Cuando la corrupción es el pan nuestro de cada día, hay que tener el valor moral de pasar hambre.