No
hay que especular con la posibilidad de que los sueños se cumplan.
Sólo hay que regarlos con paciencia. No podarlos antes de tiempo. A
veces, no llegamos a percibir el sueño que vivimos por nuestro
empecinamiento en alcanzar otro que quizá no nos atañe.
jueves, 31 de diciembre de 2015
miércoles, 30 de diciembre de 2015
martes, 29 de diciembre de 2015
lunes, 28 de diciembre de 2015
sábado, 26 de diciembre de 2015
viernes, 25 de diciembre de 2015
¿Por
qué empeñarse en calcular la duración de la felicidad, si
precisamente la felicidad derrite los barrotes de plomo de que se
vale la rutina para intentar acorralarnos? El carácter efímero de
la felicidad no empaña su victoria: sólo ella consigue, a menudo en
condiciones adversas, contra todo pronóstico, la suspensión del
tiempo.
jueves, 24 de diciembre de 2015
miércoles, 23 de diciembre de 2015
martes, 22 de diciembre de 2015
domingo, 20 de diciembre de 2015
La
memoria no entrega nunca un relato definitivo. Es como la luz de un
faro: gira sin descanso, se detiene, avanza, descubre aquí o allá
una angostura inesperada en la ladera de la montaña, un camino entre
los árboles, la espalda de un muchacho que camina con los ojos
abiertos en la niebla. La memoria es un trabajo de toda la vida:
selecciona un hecho, lo sublima, lo cambia, lo despoja; después, lo
devuelve a la sombra tras extraer la esencia que va dando cuerpo a
esa historia que sólo tiene coherencia en el corazón de quien la
esculpe con paciencia –un recuerdo que trae una palabra que
resucita un aroma– mientras vive.
sábado, 19 de diciembre de 2015
viernes, 18 de diciembre de 2015
jueves, 17 de diciembre de 2015
miércoles, 16 de diciembre de 2015
martes, 15 de diciembre de 2015
lunes, 14 de diciembre de 2015
domingo, 13 de diciembre de 2015
Un
sentimiento se impone a los demás como aquella ola que vemos crecer
en la distancia: no hay reposo. La vida, para la gran mayoría, es un
camino lleno de obstáculos. El mismo cada semana, cada mes, cada
año. Riadas, éxodos, naufragios, terremotos, epidemias, incendios,
atentados, huracanes, enfermedades. Llegan sin avisar. No todo el
mundo los recibe igual, no todo el mundo tiene la suerte de
eludirlos. Cada día nos trae un puñado de muertes que ponen al
desnudo la verdad: la vida, para la mayoría, es la amenaza constante
de perderla. Caminar al borde del abismo. El gran milagro es
comprobar que lo hacemos sin perder la alegría. Como hay que
hacerlo.
jueves, 10 de diciembre de 2015
martes, 8 de diciembre de 2015
lunes, 7 de diciembre de 2015
domingo, 6 de diciembre de 2015
sábado, 5 de diciembre de 2015
viernes, 4 de diciembre de 2015
jueves, 3 de diciembre de 2015
De
esos hombres de mirada granítica que se disputan el poder como
alimañas, inmunes al sufrimiento que contribuyen a crear, sólo me
importa el cansancio que les asoma al rostro cuando están solos, el
desconcierto que les nubla la mirada cuando la vida los expulsa del
club. Sólo entonces se humanizan. Sólo entonces podrían aspirar a
la compasión de sus víctimas.
miércoles, 2 de diciembre de 2015
lunes, 30 de noviembre de 2015
domingo, 29 de noviembre de 2015
sábado, 28 de noviembre de 2015
miércoles, 25 de noviembre de 2015
martes, 24 de noviembre de 2015
sábado, 21 de noviembre de 2015
viernes, 20 de noviembre de 2015
jueves, 19 de noviembre de 2015
miércoles, 18 de noviembre de 2015
martes, 17 de noviembre de 2015
domingo, 15 de noviembre de 2015
sábado, 14 de noviembre de 2015
viernes, 13 de noviembre de 2015
jueves, 12 de noviembre de 2015
miércoles, 11 de noviembre de 2015
martes, 10 de noviembre de 2015
lunes, 9 de noviembre de 2015
Nada
tiene en mi memoria la fuerza evocadora que desata esta puerta de la
vieja casa familiar que hoy tengo fotografiada en mi mesa de trabajo.
La humedad, los hierbajos y la carcoma intentan desfigurarla, pero yo
sigo creyendo que justo detrás de ella perduran y se ahondan las
raíces (es verdad que invisibles bajo el abandono) de la felicidad.
domingo, 8 de noviembre de 2015
viernes, 6 de noviembre de 2015
jueves, 5 de noviembre de 2015
miércoles, 4 de noviembre de 2015
martes, 3 de noviembre de 2015
domingo, 1 de noviembre de 2015
sábado, 31 de octubre de 2015
viernes, 30 de octubre de 2015
jueves, 29 de octubre de 2015
miércoles, 28 de octubre de 2015
lunes, 26 de octubre de 2015
domingo, 25 de octubre de 2015
sábado, 24 de octubre de 2015
El
misterio de una flor que empieza a marchitarse en el instante sublime
de su esplendor. La veo morir en el salón de casa y su cesar callado
me conmueve. Corto el tallo con un sentimiento de tristeza para que
la parte todavía saludable de la planta no se debilite. ¿No hacemos
también eso con nuestra vida, extirpar la rama que nos daña, regar
–incluso con las lágrimas de la pérdida– lo que conserva algo
de verdor?
viernes, 23 de octubre de 2015
jueves, 22 de octubre de 2015
miércoles, 21 de octubre de 2015
martes, 20 de octubre de 2015
lunes, 19 de octubre de 2015
domingo, 18 de octubre de 2015
sábado, 17 de octubre de 2015
viernes, 16 de octubre de 2015
Hay
seres que sólo abren las compuertas de su emotividad cuando se
apartan. Manifiestan el deseo o la ternura desde lejos, pero nunca se
dejan arrastrar por la turbación que acarrea la proximidad. Como si
en vez de piel llevaran sobre la carne una prótesis de acero.
Brillante y atractiva como un imán. Finísima, delicada, pero
también impenetrable.
jueves, 15 de octubre de 2015
miércoles, 14 de octubre de 2015
Desayuno.
Algunas noches me levanto a escuchar el paso cauteloso con que llegan
a casa −tienen llave− y me consuelan. Qué sería de mí si no
acudieran, como han hecho siempre, cargadas de paciencia, las
palabras. Me las tomo a sorbitos con el zumo y me pongo a vivir, ya
más tranquilo, hasta otra noche oscura de amenazas.
martes, 13 de octubre de 2015
lunes, 12 de octubre de 2015
domingo, 11 de octubre de 2015
viernes, 9 de octubre de 2015
jueves, 8 de octubre de 2015
miércoles, 7 de octubre de 2015
martes, 6 de octubre de 2015
La
pregunta difícil de contestar no es por
qué se rompe el hombre, sino
cuándo,
qué factor descoloca la pieza que mantenía el equilibrio de la
vida, siempre frágil, de cada ser. El misterio es que haya aguantado
tanto tiempo o que no espere un poco más, que no resista como tantas
otras veces. Ese hundimiento repentino, ¿no conlleva la negación de
tantos años de esfuerzo? Otra pregunta, subsidiaria de la anterior,
es por qué unos se resquebrajan al primer contacto con el
sufrimiento y viven sin encontrar jamás un pedazo de mundo sobre el
que sentir seguridad o descanso mientras otros soportan dificultades
y desgracias sin que, en lo esencial, les afecte. ¿Es mérito de
estos, debilidad de aquellos o predestinación genética en ambos
casos?
domingo, 4 de octubre de 2015
sábado, 3 de octubre de 2015
viernes, 2 de octubre de 2015
jueves, 1 de octubre de 2015
miércoles, 30 de septiembre de 2015
martes, 29 de septiembre de 2015
lunes, 28 de septiembre de 2015
domingo, 27 de septiembre de 2015
sábado, 26 de septiembre de 2015
viernes, 25 de septiembre de 2015
jueves, 24 de septiembre de 2015
miércoles, 23 de septiembre de 2015
Cada
hombre que resulta atrapado durante más de seis meses en un trabajo
por el que siente repulsión se convierte en un enfermo crónico. La
única vacuna efectiva contra el poder destructivo de ese virus es el
ejercicio de una ironía lúcida. El peor tratamiento, aunque
a ratos consuele, la autocompasión.
lunes, 21 de septiembre de 2015
domingo, 20 de septiembre de 2015
sábado, 19 de septiembre de 2015
viernes, 18 de septiembre de 2015
jueves, 17 de septiembre de 2015
miércoles, 16 de septiembre de 2015
domingo, 13 de septiembre de 2015
sábado, 12 de septiembre de 2015
viernes, 11 de septiembre de 2015
miércoles, 9 de septiembre de 2015
martes, 8 de septiembre de 2015
lunes, 7 de septiembre de 2015
domingo, 6 de septiembre de 2015
Tesoros.
Qué fácil era regresar al paraíso, recuperar los únicos tesoros
que merece la pena señalar con una equis en el mapa: la huerta, el
mar, la lluvia en los helechos y el oro del silencio a media noche,
frente a la luna llena, del que nacen todavía, muy tenues, las voces
más amadas, las mejores canciones.
jueves, 3 de septiembre de 2015
Como
hojas de otoño, han caído a mis pies. 65. A cholón. Podía no
escribir más, puesto que esas pocas palabras contienen un relato de
mil páginas, o quizá mil relatos sin un final definido, pero voy a
celebrar el día rellenando este párrafo con algunas cosas que
contribuyen a colmar, y quizá a contradecir, los nubarrones de
sombra que a veces se ciernen sobre el corazón de un hombre solo.
Una buena amiga me lo repetía a menudo: eres un tipo con suerte.
Hoy, sin que sirva de precedente, voy a darle la razón: tengo a mano
la música de Mozart, un puñado de fotos que me hablan desde todos
los rincones de la casa, algunas cicatrices serias en el cuerpo e
innumerables en el alma (las mismas que cualquier hombre común), un
flexo antiguo de película de cine negro que ilumina los rasgos
indecisos de mi letra, la dulce enfermedad del mar como un pitido en
el pecho, insomnio intermitente, la costumbre de caminar hasta casi
acariciar el horizonte, miedo a raudales, nostalgia y un cierto
sentimiento de inadaptación general que no siempre es amarga, la
melodía un poco torpe de docenas de poemas –que no llegan a ver la
luz– en la punta de los dedos, unos cuantos amigos que no siempre
están cerca, varias alergias físicas y alguna metafísica que por
lo general se manifiesta cuando la tarde languidece y renacen las
sombras, demasiados libros para tanta ignorancia, la voz de mi padre
y su aliento silencioso cerquita de mi oído izquierdo, una pitillera
de cartón fabricada con mis propias manos y un lindo cenicero
marroquí, recuerdos dolorosos que riego con paciencia para que no se
mustien, cuatro palabras indecisas que me sostienen en la oscuridad
(niebla, silencio, belleza, desnudez; o estas otras, más apretadas,
más carnales: luz, piel, sed, mar), un ejército de personajes sin
destino en los pasadizos de la imaginación, desarrapados y confusos
como si fueran humanos, varios olores inolvidables en las manos y
ningún vestigio de rencor en el corazón, una planta en la terraza
que es el espíritu vivo de mi padre, ansiedad –también, también
la del bolero–, una huerta en la memoria, artrosis, una incapacidad
radical para entender la intolerancia, varias carpetas llenas de
perplejidad y garabatos sin rumbo, una risa a flor de piel incluso en
el corazón de la desgracia, cansancio, una necesidad perentoria de
que me toquen, música hasta debajo de las uñas, fobia por fortuna
incurable a la solemnidad, un trenecito de madera y flores secas en
un jarrón de vidrio, un unicornio, varios sueños recurrentes (vivo
en el mar desde los quince años sin tocar nunca tierra; soy
carpintero y construyo mi casa a lo largo de toda la vida, la
construyo en el aire; me oigo llamar por un nombre que no recuerdo),
una invencible propensión al enamoramiento y algunos nombres
grabados a fuego en los meandros más escondidos de las venas, ruidos
extraños dentro de la cabeza, muchas horas de silencio, dudas para
subastar a la baja en el mercado, una tenacidad siempre tambaleante,
una hija en cuya mirada encuentro mi camino, una piel que se deshace
como un pétalo aunque no la rocen y arde como la paja si lo hacen,
miopía, deseo, ganas de huir una vez por semana, imágenes borrosas,
frío, una lupa para espiar los sueños, una casa en la memoria a la
que no he llegado nunca, la raíz de una esperanza enredada con mimo
entre los dedos de mi mano izquierda, no se vaya a quebrar.
A estas alturas del partido, no vamos a cambiar la apuesta: impar y
rojo.
martes, 1 de septiembre de 2015
lunes, 31 de agosto de 2015
domingo, 30 de agosto de 2015
sábado, 29 de agosto de 2015
miércoles, 26 de agosto de 2015
martes, 25 de agosto de 2015
lunes, 24 de agosto de 2015
domingo, 23 de agosto de 2015
sábado, 22 de agosto de 2015
viernes, 21 de agosto de 2015
He
pasado la noche en la ciudad de mis sueños. La luz de las
buhardillas, desorientada por la niebla, dirige mis pasos hacia la
orilla del último arrabal, donde me espera el alba del olvido, la
media luz donde lo pierdo todo: el asombro de estar vivo bajo las
estrellas, una razón para quedarme, el nombre del hotel, la silueta
del cuerpo que vine presintiendo a través de los años y mi viejo
secreto.
miércoles, 19 de agosto de 2015
lunes, 17 de agosto de 2015
domingo, 16 de agosto de 2015
sábado, 15 de agosto de 2015
viernes, 14 de agosto de 2015
jueves, 13 de agosto de 2015
El
dolor comienza con la vida. Con mano invisible y tenacidad de
artesano, esculpe desde el primer día –la tersura de la piel de
los niños es el primer espejismo– los surcos que configuran el
rostro de los hombres. La felicidad, por el contrario, es un ave
fugaz: se construye, se encuentra, se imagina o se evapora. Es cosa
nuestra. Más inconstante, asoma de vez en cuando, se oculta tras la
niebla, no deja huellas. Por eso cuesta reconocerla.
miércoles, 12 de agosto de 2015
martes, 11 de agosto de 2015
lunes, 10 de agosto de 2015
domingo, 9 de agosto de 2015
sábado, 8 de agosto de 2015
Pasa
cerca de mi puerta la que ha de devolverme lo que se fue llevando día
a día. Pareciera que he aprendido la lección y no hace falta
preguntarle nada: este era el cuento. Qué fácil será reconocer la
calma de los rostros, ponerle nombre a las voces, que escucharé más
nítidas que nunca. Como si no me hubieran sido arrebatadas.
jueves, 6 de agosto de 2015
martes, 4 de agosto de 2015
lunes, 3 de agosto de 2015
domingo, 2 de agosto de 2015
sábado, 1 de agosto de 2015
jueves, 30 de julio de 2015
miércoles, 29 de julio de 2015
Un
asunto que entretiene mucho a los humanos en este fin de siglo es la
estadística, para regocijo de sociólogos y otros expertos adictos a
esa rama del saber. Se calculan concienzudos porcentajes acerca de
cualquier cosa: la producción moluscos en el Cantábrico, el número
de turistas que cruzan por una puerta, las veces que tropieza la
Ministra de Cultura, el sentimiento religioso de los adolescentes
rubios de la provincia de Logroño, el aumento en el consumo de
pasas, la tristeza de los pájaros cuando llueve muy seguido, las
veces que los enfermos de próstata van al baño, si Dios existe o
solamente sobrevive, si la juventud es más o menos conservadora que
hace diez o doce días, si el epitelio de los gatos contribuye a la
contaminación o la mitiga, si la inteligencia de las chicas es un
23% menos abstracta que la de los chicos y la pulsión violenta de
éstos un 99,9% más acusada que la de aquellas. Nada escapa a la
omnipotencia de esa diosa.
martes, 28 de julio de 2015
lunes, 27 de julio de 2015
domingo, 26 de julio de 2015
sábado, 25 de julio de 2015
jueves, 23 de julio de 2015
martes, 21 de julio de 2015
Otra
vez un fulgor en el espejo como venido de ninguna parte. Le sostengo
la mirada y recibo en silencio su sonrisa. No es fácil deshacer esta
presencia que juega al escondite con mis cosas como si fuera la dueña
de la casa. Qué pronto llegas hoy, vieja costumbre, parte de mí que
el mundo desconoce, alma errante que no encuentra cobijo.
lunes, 20 de julio de 2015
sábado, 18 de julio de 2015
viernes, 17 de julio de 2015
jueves, 16 de julio de 2015
martes, 14 de julio de 2015
lunes, 13 de julio de 2015
viernes, 10 de julio de 2015
jueves, 9 de julio de 2015
lunes, 6 de julio de 2015
domingo, 5 de julio de 2015
viernes, 3 de julio de 2015
jueves, 2 de julio de 2015
miércoles, 1 de julio de 2015
martes, 30 de junio de 2015
El
tanque de gasolina se vacía de pronto. Me cuesta mover las cuatro
estacas de hueso que sostienen mi cuerpo. Me pesa como una losa. Una
pompa de aire se infla hasta poner a punto de reventar las
circunvoluciones del cerebro. No sé bien qué camino debería tomar:
a) diez días de vacaciones junto al mar sin aceptar la más mínima
discusión, comer bien, dar interminables paseos entre pinos
cambiando de mano de vez en cuando el bastón de mi padre, sentarme a
contemplar las nubes, acostarme pronto, leer cosas ligeras, no llevar
lápiz ni papel –esto último, imprescindible–; b) una cura de
sueño en un sanatorio de las montañas; c) un cambio de identidad:
levantarme, digamos, cazador de serpientes en Birmania (¿hay
serpientes en Birmania?); d) aceptar mis limitaciones y suspender por
un tiempo el trabajo. Lo que seguramente haré será: e) pedalear,
pedalear, pedalear como un ciclista veterano hasta caer rendido en la
meta, cuando el resto hace ya más de una hora que ha llegado y los
periodistas escriben su crónica, calentitos, en la cafetería del
hotel.
lunes, 29 de junio de 2015
domingo, 28 de junio de 2015
sábado, 27 de junio de 2015
Faro.
Abro con cautela −quién sabe si excesiva− la puerta de mi casa.
Bebo agua con ansia, cierro los ojos, me descalzo. Sólo entonces
escucho la voz de la vida, que no se ha dejado atrapar en las redes
de la oscuridad, y busco entre sus páginas la última palabra. O la
primera. La que dejé encendida hace unas horas en medio de la noche
para no extraviarme.
viernes, 26 de junio de 2015
jueves, 25 de junio de 2015
miércoles, 24 de junio de 2015
martes, 23 de junio de 2015
lunes, 22 de junio de 2015
Cuida tus ambiciones, pueden
llegar a envenenarte. La acumulación de riqueza, el poder sobre los
otros, la persecución del éxito a cualquier precio, acaban teniendo
consecuencias: la corrupción, la esclavitud y, en el mejor de los
casos, la soledad. La mala soledad. Porque hay una soledad
beneficiosa, la que persigue la sabiduría, la que forcejea en lo más
íntimo de nosotros por entender el mundo, ese misterioso bucle entre
el afán creativo y el atávico anhelo de destrucción en que
consiste la historia de la humanidad.
sábado, 20 de junio de 2015
viernes, 19 de junio de 2015
miércoles, 17 de junio de 2015
Mi
espíritu es volátil como uno de esos insectos que se golpean,
ebrios, contra las bombillas del techo como si buscaran el origen
mismo de la luz. Nació poco dispuesto para el disfrute de la
grandeza: se le atragantan las majestuosas catedrales (prefiere
recluirse en el frescor humilde de las pequeñas ermitas de las
aldeas), le cansan las grandes sinfonías (apetece más a menudo el
bocado breve de una sonata para violín o los Impromptus de
Schubert), le intimidan los cerrados sistemas filosóficos, el
pensamiento puro (es más proclive a la obra fragmentaria de
pensadores “poéticos”, que van al grano, a veces con apuntes de
cuatro líneas que lo desvelan todo). Es anárquico y variable.
Curioso más que ávido. Perseguidor, más que del paisaje cegador de
una verdad definitiva, de un lugar cálido donde reconocer el latido
de los enigmas invisibles que nos rodean, una franja de luz en el
suelo de la habitación, el trabajo tenaz de una arañita en su
rincón, el soplo leve de unas palabras a media voz para avivar el
fuego de la vida.
martes, 16 de junio de 2015
lunes, 15 de junio de 2015
domingo, 14 de junio de 2015
viernes, 12 de junio de 2015
El
“artista” tiene a mano múltiples instrumentos que le dan la
posibilidad de sortear el peligro, engañándose a sí mismo si hace
falta. El hombre común, frente al descalabro, ni siquiera tiene la
capacidad de entretenerse con interpretaciones que de alguna manera
lo mitigan. Sólo dispone de su coraje íntimo, su dignidad, su
resistencia y, como todos, de la misteriosa alianza del tiempo.
miércoles, 10 de junio de 2015
martes, 9 de junio de 2015
lunes, 8 de junio de 2015
sábado, 6 de junio de 2015
viernes, 5 de junio de 2015
jueves, 4 de junio de 2015
miércoles, 3 de junio de 2015
lunes, 1 de junio de 2015
Nos
hace tambalearnos la conciencia (casi siempre nos pilla
desprevenidos) de que todo puede desaparecer en este momento:
el calor en la mirada de quien nos habla, el último velo de un
recuerdo, un edificio que parecía sólido, las ganas de vivir.
Aprecia el valor de cada una de esas cosas con el entusiasmo y la
inocencia de un niño.
sábado, 30 de mayo de 2015
viernes, 29 de mayo de 2015
No
me gustan demasiado la mayoría de las fotografías porque
inmovilizan la vida y desvirtúan la expresión del retratado, la
fusilan
para siempre en una de sus múltiples posibilidades. Al fin y al
cabo, no es más que el efecto de un disparo. Me escama esa
pretensión de fidelidad con que parece decirnos: “así eras tú
hace diez, veinte, treinta años”. Demasiado fácil. No dice nada
de cómo era dos minutos antes, de las ilusiones que probablemente
ardieron esa tarde, del misterio o el miedo que tal vez se está
gestando detrás de una mirada absorta, de los sueños que la noche
anterior me desvelaron. De lo que estaba empezando a ser. Salvo
aquellas, claro, que revelan
el alma del fotógrafo.
jueves, 28 de mayo de 2015
martes, 26 de mayo de 2015
lunes, 25 de mayo de 2015
domingo, 24 de mayo de 2015
viernes, 22 de mayo de 2015
jueves, 21 de mayo de 2015
martes, 19 de mayo de 2015
domingo, 17 de mayo de 2015
viernes, 15 de mayo de 2015
jueves, 14 de mayo de 2015
martes, 12 de mayo de 2015
Cualquiera
que se vea acorralado por la vida en un callejón sin salida sabe que
tiene dos posibilidades: dejarse acuchillar contra la tapia o repeler
el ataque, entregarse o combatir. Nadie sabe a priori qué camino
elegirá. Como el hombre necesita de mitos para magnificar la vida,
que tantas veces se le aparece como una cosa chata y sin alicientes,
tiene más prestigio la respuesta heroica, pero no siempre trae
consigo la salvación. A veces, bajar los brazos hace que el enemigo
se confíe y deje una hendidura por la que entra la porción exacta
de aire que reclamaban los pulmones del agredido o que descubra un
flanco por el que escapar. Cuánta divagación. El sufrimiento no es
una medalla para exhibir en el pecho, salvo que uno sea estúpido,
sino un elemento ineludible de la condición humana. Lo sustancial es
no rendirse.
domingo, 10 de mayo de 2015
viernes, 8 de mayo de 2015
miércoles, 6 de mayo de 2015
martes, 5 de mayo de 2015
lunes, 4 de mayo de 2015
domingo, 3 de mayo de 2015
sábado, 2 de mayo de 2015
Escribir
cualquier cosa: poemas envueltos en una nebulosa de confusión que
dará con la mayoría en la papelera, fragmentos que nacen con la
fragilidad de una cometa en medio del huracán, peticiones de
socorro, epitafios, signos, enigmas que sólo el paso del tiempo, o
tal vez el olvido, llegarán a desvelar.
jueves, 30 de abril de 2015
Inventario.
La mano que se atreva a explorar el bolso que ellas acarrean, como si
tal cosa, a todas partes, tropezará, antes o después, con dos o
tres capuchas de bolígrafo, un paquete de alcayatas, un mechero con
una inscripción indescifrable, cartas de amor casi ilegibles, un
llavero en forma de pájaro tropical, botones de varios tamaños, el
aroma del mar, un estuche para la manicura, fotografías absortas en
el tiempo, las iniciales en carne viva de un pañuelo, las canicas de
un sobrino, la tapadera de una trampa, algunas monedas del último
viaje a Portugal, el envoltorio de un caramelo, un búho de oro en
miniatura, una libreta llena de secretos, la música de un fado
atrapada en un pespunte, el cerco de una lágrima, una cajita de
nácar sin sortija, el rastro de un silencio que ha cumplido diez
años, el relincho de un caballo entre la niebla, un sello de
correos, una entrada de cine de la fila trece, el verso más triste
de Rainer María Rilke, un carrete de hilo, un frasco diminuto de
perfume, briznas de tabaco, azucarillos, la canción desesperada, un
abanico con las varillas sueltas, el plano casi ilegible del tesoro,
el nombre de un paraje desconocido, la luz del faro, el cascabel que
nadie se atrevió a ponerle al gato, lápiz de ojos, la dirección de
una peluquería en el Barrio Sur de Montevideo, una lima de cartón,
un sueño.
miércoles, 29 de abril de 2015
martes, 28 de abril de 2015
lunes, 27 de abril de 2015
Suscribirse a:
Entradas (Atom)